Se atenderá orden, pero no se detendrá la obra de Tren Maya: AMLO
Un juez federal de Chiapas otorgó una suspensión definitiva contra la construcción del Tramo 1 que va de Palenque a Escárcega.
México
Hay tintes políticos en la intención de detener las obras del tren maya afirmó el presidente Andrés Manuel López Obrador al asegurar que la obra seguirá porque es una de las más importantes para su administración.
En la mañanera desde el Antiguo Palacio del Ayuntamiento dijo que se acatará la decisión del Juez Segundo de Distrito de Amparo y Juicios Penales Federales de Chiapas que otorgó una suspensión definitiva contra la construcción del Tramo 1 del Tren Maya, que va de Palenque a Escárcega, sin embargo insistió, la obra del proyecto Tren Maya, continuará.
“Vamos a cumplir vamos a hacerle caso vamos a respetar a la autoridad todavía no sabemos Qué efectos tiene porque esto no se origina realmente por dónde va a pasar el Tren Maya, la promoción del amparo, no son los que podrían resultar afectados o presuntamente afectados, no, son organizaciones esto tiene tintes políticos, además es legítimo, pero son los que no quieren que hagamos nada”.
Y es que el amparo fue promovido por Asociación Civil Indignación, Promoción y Defensa de los Derechos Humanos que explicó que existe una obligación tanto de Fonatur como de las empresas ganadoras de la licitación en el tramo, detener todo trabajo correspondiente a cualquier obra que no sea la del mantenimiento de las vías ya existentes, hasta en tanto el juicio de amparo no sea resuelto. López Obrador insistió que no habrá afectación ambiental.
“El que no tiene una idea de esto piensa que se va a destruir la selva, y hasta mi hijo me cuestiono de tuve que explicar que al contrario, se está llevando a cabo en el sureste y en el país el programa más importante de reforestación en el mundo… a ver desafío reto este con respeto también a que me digan ¿en dónde, en qué parte del mundo, en qué país del mundo se están plantando árboles en un millón de hectáreas, dónde?”
Aseveró que no es posible detener la construcción ya que no habrá obras nuevas y sólo se mejorarán los rieles, teniendo un tren que corra a 160 kilómetros por hora y eléctrico por lo que no habrá contaminación ni se desaparecerá la selva.