Buckingham Palace expone sus diamantes con ocasión del jubileo de Isabel II
Destacada la tiara de diamantes Girls of Great Britain and Ireland, una de las favoritas de la monarca

Londres.- Una selección de diamantes de la colección real, incluidas algunas joyas personales de la reina Isabel II, será expuesta al público el próximo verano en el palacio de Buckingham, con ocasión del 60 aniversario de la llegada al trono de la soberana británica
Entre las joyas más destacadas que podrán verse en agosto y septiembre figura la tiara de diamantes Girls of Great Britain and Ireland, una de las favoritas de la monarca, que la lució en noviembre pasado durante un banquete de Estado en honor del presidente turco Abdulá Gul
La pieza, conocida como la "Granny's tiara" (la tiara de la abuelita), fue recibida como regalo de boda en 1893 por la futura reina María, quien se la obsequió posteriomente a su nieta, la ahora Isabel II, cuando ésta se casó con Felipe Mountbatten en 1947
Los visitantes también tendrán ocasión de contemplar los deslumbrantes collar y pendientes que eligió la reina para su coronación en la abadía de Westminster el 2 de junio de 1953, más de un año después de ser entronizada a la muerte de su padre Jorge VI
Creado en 1958 para la reina Victoria, la única reina que celebró hasta ahora su jubileo de Diamante, el collar está formado por 25 gemas de gran tamaño de los que cuelga otro impresionante diamante amovible de 22 quilates en forma de lágrima
Se exhibirán, además, la reconocible corona miniatura de la reina Victoria, que pese a su reducido tamaño lleva 1.200 diamantes incrustados, y el impresionante collar con pulsera a juego que el gobierno de Sudáfrica le regaló a la actual soberana cuando cumplió 21 años
El palacio de Buckingham, residencia oficial de la reina Isabel II, abre tradicionalmente en verano sus puertas al público, que puede admirar sus salones y la impresionante colección de muebles y obras de arte que contienen, así como sus jardines
Un récord de 600.000 personas pasaron el año pasado por el palacio, cuya principal atracción fue el vestido de novia que lució Catalina en su boda con el príncipe Guillermo, nieto de la reina y segundo en la línea sucesoria.