Jimena Villicaña se deslinda de la marcha del 20 de noviembre de la Generación Z y acusa deslegitimación
Jimena Villicaña negó haber convocado a la marcha del 20 de noviembre y acusó al Gobierno Federal de intentar deslegitimar al Movimiento de la Generación Z que denuncia la violencia y la impunidad en México.

¿Cómo fue el ambiente en la marcha Generación Z?
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En entrevista con Gabriela Warkentin, la activista Jimena Villicaña aseguró que el Gobierno Federal intenta deslegitimar al Movimiento de la Generación Z, y aclaró que no convocó a la marcha anunciada para este 20 de noviembre. Indicó que la convocatoria proviene de una cuenta nueva y desconocida, por lo que decidió no participar: “yo personalmente no voy a salir”.
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Villicaña señaló que los jóvenes que participaron en la movilización del pasado 15 de noviembre entienden el momento crítico que vive el país y exigen poner fin al pacto de impunidad. Afirmó que desde el gobierno se tejen alianzas con células criminales y se detiene a jóvenes por manifestarse, etiquetándolos sin pruebas.
“Evidentemente es una respuesta a que estamos hartos y hartas de vivir con miedo… más de 60 personas son asesinadas todos los días; una de cada cuatro corresponde a jóvenes entre los 15 y 28 años”.
— Jimena Villicaña
Denuncian intentos de desvirtuar protestas y uso político
La activista recordó que fue vocera antes de la marcha del 15 de noviembre y pidió a dirigentes políticos no intervenir en movilizaciones que surgieron “de la propia ciudadanía”. Advirtió que los partidos pueden perjudicar la credibilidad del movimiento si intentan apropiarse de él.
“La realidad es que el móvil de la manifestación es que lo que se vive en el país es una situación insoportable. Yo creo que esto se detona a raíz de lo que sucede con Carlos Manso”.
— Jimena Villicaña
Asimismo, acusó que el Gobierno Federal está desesperado por desviar la atención de las múltiples acusaciones, como el caso de Adán Augusto López, y reiteró que son las autoridades quienes deben responder por la crisis de violencia.Dijo que desde un inicio se intentó descalificar al Movimiento de la Generación Z acusándolo de ser operado por “bots”, pero al no poder comprobarlo, persisten en desvirtuar las protestas.




