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  • 14 MAY 2025, Actualizado 07:15

Los hermanos Menéndez reciben nueva sentencia: Podrían salir libres

Los hombres fueron sentenciados en 1996 por asesinar a sus padres

Lyle y Erik Menéndez fueron sentenciados en 1996 a cadena perpetua sin posibilidad a libertad condicional.

Lyle y Erik Menéndez fueron sentenciados en 1996 a cadena perpetua sin posibilidad a libertad condicional. / Ted Soqui

Los hermanos Lyle y Erik Menendez acarician la posibilidad de quedar en libertad, luego que un juez de Los Ángeles redujo su condena de cadena perpetua a 50 años de prisión.

Con esta medida, los hombres de 57 y 54 años, quienes llevan 35 años en la cárcel por el homicidio de sus padres, podrían acceder a la libertad condicional, bajo la ley de delincuentes juveniles de California, debido a que tenían menos de 26 años al cometer el doble crimen.

Erik y Lyle Menéndez posan a la entrada de su casa en Beverly Hills, en noviembre de 1989. / Los Angeles Times

El magistrado Michael Jesic consideró que después de 35 años tras las rejas, merecen la posibilidad de ser liberados.

Ahora es la junta estatal de libertad condicional la que tendrá que decidir si Lyle y Erik Menéndez pueden salir de la prisión.

¿Quiénes son los hermanos Menéndez?

Lyle y Erik Menéndez son hijos de José Menéndez, un ejecutivo de la música de origen cubano, y de Kitty, ama de casa.

El 20 de agosto de 1989, Lyle y Erik asesinaron a sus padres en su casa de Beverly Hills, en Los Ángeles, California. Les dispararon con escopetas en más de 10 ocasiones cuando se encontraban en la sala de su casa viendo la televisión.

Los jóvenes, entonces de 18 y 21 años, intentaron encubrir el doble homicidio, se hicieron de una coartada y culparon a la mafia del crimen.

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Sin embargo, en 1993 fueron sometidos al primero de dos juicios nulos, donde el jurado no logró un veredicto unánime tras escuchar los testimonios de Lyle y Erik Menéndez, quienes argumentaron defensa propia debido a que sufrieron abuso sexual durante años por parte de su padre.

En 1996, en un nuevo juicio fueron condenados a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional, por el delito de asesinato en primer grado con agravantes.

Ahora, 35 años después, Lyle y Erik Menéndez tienen la posibilidad de solicitar la libertad condicional, luego que un juez les redujo la pena de cadena perpetua por 50 años de prisión.

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