Marcha de madres buscadoras es recordatorio de miles de desaparecidos
Araceli Rodríguez del colectivo Colibrí hizo un llamado de empatía a la sociedad, de labor a las autoridades y un alto a la agonía de las madres buscadoras

Madres buscadoras no tienen nada que celebrar este 10 de mayo
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Cada año marchamos en Reforma y del monumento a la Madre al Zócalo como un recordatorio de que nos faltan 116 mil personas desaparecidas en el país, y aunque decimos que no tenemos nada que festejar, estamos para aquellos que nos quedan, señaló la activista y madre buscadora del colectivo Colibrí, Araceli Rodríguez.
En el espacio de “Así las Cosas” con Gabriela Warkentin y Javier Risco, compartió que el colectivo Colibrí, nace luego de la desaparición de siete policías y un civil, entre ellos Luis Ángel, su hijo, ocurrida el 16 de noviembre de 2009, cuando él tenía solo 23 años y fue bajo encomienda a ocupar la SSP municipal en Ciudad Hidalgo, Michoacán, sin dejar de pertenecer a las fuerzas federales, compartió.
“Cada día salimos con la esperanza de encontrarles y aunque no sean restos del mío son de otra personita y si la autoridad hace un buen trabajo de peritaje, en la identificación humana le damos paz a una familia”.
“Dolorosa la búsqueda, porque la desaparición no debió suceder nunca y la desaparición no es normal”, afirmó.
Ella recuerda a su hijo como una persona muy justa, de ahíi que fuera policía porque el quería servir y proteger a la ciudadanía, aunque “la corporación para la que mi hijo juró lealtad no lo protegió”.
Envió un mensaje a la sociedad de empatía y a las autoridades el llamado a realizar su trabajo y poner un alto a la agonía de las madres.