Suegra de Obama le toma el gusto a la Casa Blanca

México.- La suegra de Barack Obama vivió toda su vida en Chicago y la idea de mudarse a la Casa Blanca no le entusiasmaba demasiado. Prueba por tres meses, le propuso la familia, según cuenta su yerno

Un año después, Marian Robinson se siente muy a gusto en su nuevo hogar

Pasa mucho tiempo con sus nietas Malia y Sasha, de once y ocho años, pero realiza otras actividades. Como dice el presidente, "se maneja muy bien en la ciudad"

La señora Robinson, quien es viuda, se ha hecho muchas amistades, a las que invita a la Casa Blanca. Se va de compras por su cuenta, disfruta visitando el Centro Kennedy, lleva a Malia y Sasha a la escuela y luego las recoge prácticamente todos los días. Y logra hacerlo todo desde un anonimato que complace a su hija Michelle y a Obama. Y les da también un poco de envidia

"Se maneja muy bien en la ciudad", dice Obama. "Y no se complica. Cruza el portón y a otra cosa"

La señora Robinson ha dado pocas entrevistas desde que se instaló en la Casa Blanca. Pero dejó en claro que no le gustaba la idea de mudarse y que lo hizo a regañadientes. En Chicago tiene varios hermanos y hermanas con los que se ve poco ahora

"Me trajeron arrastrada y eso no me gusta", expresó Robinson, quien tiene 72 años, en el programa de CBS "Sunday Morning" el año pasado. "Pero hago lo que me corresponde"

La esposa de Obama dice que su madre parece contenta con su nuevo hogar

"No le gustaba la idea, hubiera preferido seguir haciendo su vida de siempre", expresó Michelle Obama. "Por eso me alegra de que se sienta bien aquí y piense que esta también es su casa"

La señora Robinson salió por primera vez del país el año pasado, en el avión presidencial Air Force One, y visitó Rusia, Italia y Ghana. Junto con la familia, conoció al Papa, estuvo en el Coliseo y recorrió las instalaciones por donde pasaron miles de esclavos en la costa de Ghana

Va con la familia a la casa de fin de semana de Camp David. Pero no los acompañó en sus vacaciones de verano en Martha's Vineyard ni pasó con ellos la Navidad a Hawai, donde nació Obama

Su habitación está en el tercer piso de la Casa Blanca (los Obama y las niñas ocupan el segundo piso) y no cena con ellos todos los días, para que "la familia de Michelle" pueda estar sola

La señora Robinson protege su privacidad, pero disfruta las salidas

Participa en muchos actos de la Casa Blanca y su única presentación pública oficial fue en el verano pasado, cuando ella y la secretaria de educación Arne Duncan, una vieja amiga, leyeron cuentos escolares. Al responder a preguntas de los niños, dijo que su vida era "maravillosa" y que la Casa Blanca "es mucho más grande que cualquier cosa que yo conocía"

Obama dijo en una entrevista radial que su suegra la pasaba muy bien con Betty Currie, quien fuera secretaria personal del presidente Bill Clinton, y se instalaba en el balcón presidencial en el Centro Kennedy. Hace poco vio allí una presentación del ballet de Alvin Ailey

Michelle Obama dice que su madre está tan ocupada haciendo sus cosas que "pronto va a venir y a decirme 'lo siento, pero no puedo recoger a las chicas. Tengo mucho que hacer"'

"Las chicas" es la razón por la que los Obama querían que la señora Robinson los acompañase a la Casa Blanca

Durante la campaña electoral los Obama viajaron tanto que la abuela pasó a ser una especie de segunda madre para las niñas. La señora Robinson, quien ganó medallas de oro en los 50 y lo 100 metros en las olimpiadas para personas mayores de Illinois en 1997, fue secretaria en un banco hasta que se jubiló y comenzó a dar una mano con la crianza de las nietas

Las ayudó a adaptarse a una nueva ciudad y, por más que el año pasado dijo que se sentía "un poco olvidada" porque las niñas crecen a paso acelerado, sigue siendo una presencia importante en sus vidas, del mismo modo que ellas lo son en la suya

Los otros tres nietos de la señora Robinson viven en la costa oeste, donde su hijo Carig es técnico del equipo masculino de básquetbol de la Oregon State University. Tiene dos mujeres adolescentes, Avery y Leslie, y un varón de seis años, Austin

Su esposo Fraser, quien trabajó en la planta purificadora de agua de Chicago pese a padecer esclerosis múltiple, falleció en 1991

La presencia de algún suegro en la Casa Blanca no es nueva. El suegro de Ulysses S. Grant vivió allí unos años, lo mismo que la suegra de Harry S. Truman, quien lo hizo a pesar de que no se llevaba bien con su yerno. La segunda esposa de Woodrow Wilson se llevó a su madre y una hermana.