;
  • 13 AGO 2025, Actualizado 07:18

Tu hijo no necesita ser popular: te necesita a ti

En una etapa marcada por la inseguridad y la necesidad de pertenecer, lo que realmente construye la autoestima de tus hijos no es la popularidad, sino el vínculo emocional que tienen contigo.

Tu hijo no necesita ser popular: te necesita a ti

Tu hijo no necesita ser popular: te necesita a ti

La trampa de la popularidad adolescente

Hoy más que nunca, niños y adolescentes viven bajo la presión de pertenecer, de ser aceptados por sus pares, de tener likes y cumplir con expectativas sociales que muchas veces los alejan de su verdadera identidad. En entrevista con Martha Debayle, la terapeuta Marcela Escalera fue contundente: “Tu hijo no necesita ser popular, te necesita a ti”.

Muchos padres se preocupan porque sus hijos no son invitados a fiestas, no son parte del grupo “popular” o simplemente no encajan. Pero detrás de esa preocupación, hay una idea errónea: que la autoestima se construye desde afuera. La realidad es que el verdadero bienestar emocional se edifica en las relaciones más cercanas, en especial, con los padres.

La clave está en la autoestima, no en la aceptación social

Durante la adolescencia, es natural querer parecerse a los demás. Pero también es el momento crucial para descubrir quién eres, para diferenciarte, para decir “no” con seguridad. Ser capaz de decir “yo no quiero hacer eso” o “yo elijo diferente” es señal de una autoestima sólida.

La presión por ser aceptado puede llevar a nuestros hijos a perderse a sí mismos. Y cuando los padres priorizan la popularidad adolescente sobre el crecimiento interior, contribuyen a esa desconexión.

La clave está en la autoestima, no en la aceptación social / Kaori Ando

TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR: ¿Estás harto de ser papá? El burnout parental y cómo sobrevivir a la adolescencia de tus hijos

El rol de los padres: construir un vínculo seguro

La base de una buena salud emocional en niños y adolescentes no está en la aprobación de sus amigos, sino en contar con un vínculo seguro con al menos un adulto significativo. Ese adulto, idealmente, eres tú.

Marcela Escalera lo explica con claridad: si como padre o madre le haces sentir a tu hijo que es sensacional, valioso, que puede ser vulnerable contigo sin juicio, estás construyendo el espacio emocional donde podrá refugiarse, fortalecerse y crecer.

Validar sus emociones: el pilar de la salud emocional infantil

Una de las prácticas más importantes es validar las emociones de tus hijos. No se trata de minimizar lo que sienten (“¡pero si tú eres guapísimo!”) ni de resolverlo todo con regalos o frases de consuelo. Se trata de escuchar con atención, preguntar, interesarse genuinamente y dejar claro que sus sentimientos son legítimos.

Frases como “cuéntame cómo te sientes” o “entiendo que eso te duela” son mucho más poderosas que cualquier intento de corrección. La validación emocional construye autoestima y refuerza el vínculo entre padres e hijos.

¿Cómo ser un modelo emocional? Conecta desde su mundo

A veces, para acercarte, hay que entrar en su mundo: ver sus series, jugar sus videojuegos, ir a un concierto o simplemente acompañarlos a los tacos. La conexión emocional se construye desde lo cotidiano. No se trata de imponer, sino de invitar: “ven conmigo, quiero compartir esto contigo”.

Y sí, a veces te dirán que no, te cerrarán la puerta o voltearán los ojos. Pero eso no significa que no te necesiten. En realidad, es cuando más te necesitan. Crear un vínculo seguro implica estar ahí, con constancia y empatía, aun cuando tu hijo parezca indiferente.

El rol de los padres: construir un vínculo seguro / Oliver Rossi

El proceso de diferenciación emocional: “matar a los papás”

Durante la adolescencia, los hijos necesitan separarse simbólicamente de sus padres para encontrar su identidad. A esto se le llama “matar a los papás”, y es parte del proceso de madurez. Pero separarse no significa romper el vínculo. Como lo explicó Marcela Escalera, tú sigues siendo la raíz emocional que los sostiene.

No se trata de controlar sus decisiones, sino de ser ese referente emocional que les da libertad sin abandono, contención sin invasión.

Ser un adulto emocionalmente maduro: el verdadero liderazgo parental

Muchos padres se frustran cuando sus hijos los rechazan, y reaccionan desde la herida: “ah, pues si no me hablas, yo tampoco”. Grave error. Ser el adulto en la relación significa no tomarlo personal, regular tus respuestas y recordar que tú eres quien debe liderar la relación.

La madurez emocional en la crianza implica invitar a tus hijos a estar en tu presencia sin imponer. Encontrar espacios de conexión donde ellos se sientan vistos, escuchados y validados es esencial para construir una autoestima sana y duradera.

Dale play y escucha la entrevista completa en: https://youtu.be/eTOt-l1bnVk

El siguiente artículo se está cargando

Escucha la radioen vivo

W Radio México
En vivo

Tu contenido empezará después de la publicidad

Programación

Ciudades

Elige una ciudad

Compartir

Más acciones

Suscríbete

Tu contenido empezará después de la publicidad