¿Quién fue el personaje del Chavo del 8 a quien Chespirito encontró muerto en el set de grabación; Qué le pasó?
Esta es la verdad detrás de la trágica muerte de uno de los cómicos de los programas creados por Roberto Gómez Bolaños
Uno de estos personajes del Chavo del 8 falleció en el set de grabación.
Con la popularidad de la serie biográfica de Roberto Gómez Bolaños, “Chespirito: Sin Querer Queriendo” que recientemente se estrenó en HBO Max, uno de los episodios más trágicos en torno al elenco de cómicos resurgió, la triste muerte de uno de los personajes del Chavo del 8.
¿Quién fue el personaje del Chavo del 8 que falleció en el set de grabación?
La pérdida que en estos días revivió con el capítulo más reciente de la bioserie de Bolaños, se trata de la muerte de “Jaimito, el cartero”, interpretado por Raúl ‘Chato’ Padilla, Quien habría sido encontrado sin vida por el mismo Chespirito, en los sets de grabación.
Una de sus frases más emblemáticas representando al entrañable personaje del Chavo del 8, fue: “Es que quiero evitar la fatiga”.
¿Quién era y cómo murió Jaimito, el cartero?
Raúl “Chato” Padilla fue un reconocido actor y comediante mexicano, originario de Monterrey, recordado por sus interpretaciones en los contenidos creados por Roberto Gómez Bolaños. Nació en Nuevo León el 17 de junio de 1918 y logró una destacada carrera en el ámbito teatral, cinematográfico y televisivo en México. En especial con su entrañable personaje de Jaimito “El Cartero”, con el que alcanzó gran reconocimiento a nivel internacional a partir de 1979.
El comediante falleció el 3 de febrero de 1994 a los 75 años de edad en la Ciudad de México, tras haber sufrido un infarto agudo al miocardio, derivado de una cardioesclerosis y sumado a algunas complicaciones de salud como consecuencia de diabetes mellitus.
Algunas versiones señalan que la muerte de el “Chato” Padillar fue en el set de grabación de un sketch para el programa “Chespirito” y que fue el propio Roberto Gómez Bolaños quien habría encontrado a su compañero sin vida en el set de grabación.
“Después de grabar lo estuve esperando en la escalera para demostrarle que yo también podía brincar desde el quinto escalón. Pero no bajaba. Entonces subí para ver si le pasaba algo y ya estaba muerto. Se evitó la fatiga para siempre”, indica un fragmento escrito por Gómez Bolaños en uno de sus libros.
