Netanyahu promete respuesta “siete veces mayor” tras ataque con misiles en Tel Aviv
El primer ministro israelí anunció represalias amplificadas contra los autores del ataque desde Yemen, responsabilizando a Irán y reafirmando su alianza estratégica con Estados Unidos.

BIBICONGRESS / The Washington Post
El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, no dejó espacio a la ambigüedad. Tras el impacto de misiles en Tel Aviv, presuntamente lanzados desde Yemen por facciones respaldadas por Irán, el mensaje fue directo: Israel responderá, y lo hará con fuerza multiplicada.
En una breve declaración, acompañado por el ministro de Defensa, Israel Katz, Netanyahu dejó claro que la represalia será diseñada “en el momento y lugar que nosotros elijamos”. Agregó que “quien se atreva a atacarnos enfrentará una respuesta siete veces mayor”, reviviendo una narrativa de castigo ejemplar, con resonancia tanto política como religiosa.
Respuesta aérea sobre Yemen
Israel lanza ataques tras el impacto en su capital
Horas después del mensaje, drones y aviones de combate israelíes realizaron incursiones sobre objetivos en Yemen, en lo que fue descrito como una operación quirúrgica dirigida contra centros de lanzamiento y depósitos de armas vinculados a los hutíes. Las autoridades yemeníes, sin embargo, han reportado también víctimas civiles.
EE. UU. entra en la ecuación
Netanyahu confirma coordinación directa con Washington
La retórica de Netanyahu no se limitó a la escena regional. Mencionó que “Estados Unidos, en coordinación con nosotros, también está actuando contra ellos”. Con ello, reafirma una línea de cooperación militar y diplomática con Washington que, en medio del conflicto, se vuelve esencial.
Un nuevo umbral en la guerra
La ofensiva contra Tel Aviv transforma la narrativa del conflicto
El ataque a Tel Aviv marca un nuevo punto de inflexión. No es solo el alcance de los misiles o su origen, sino el consenso creciente dentro del gabinete israelí: esta guerra no puede contenerse en fronteras. Las implicaciones son globales. La respuesta, anunció Netanyahu, ya está en marcha. No será simbólica. Será “siete veces mayor”.

BIBICONGRESS / The Washington Post