Rechaza Conferencia del Episcopado Mexicano asesinato de migrantes en Chiapas
Los obispos de México consideraron que no es un hecho aislado sino consecuencia de la militarización de la política migratoria, y una mayor presencia de fuerzas armadas en la frontera sur del país
Luego de la muerte de seis personas migrantes a manos del Ejército mexicano en Chiapas, la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), a través de la Dimensión Episcopal de la Pastoral de Movilidad Humana rechazó el uso desproporcionado de la fuerza letal por parte de los elementos.
“La CEM rechaza de manera enfática el uso desproporcionado de la fuerza letal por parte de agentes del Estado lo que ocasionó, hasta el momento, la muerte de seis personas migrantes y diez más resultaron heridas”, aseguró monseñor Guadalupe Torres Campos, Obispo de Ciudad Juárez.
El también responsable de la Dimensión Episcopal de la Pastoral de Movilidad Humana de la CEM a través de un comunicado, indicó que esta tragedia surge, no como un hecho aislado sino, como consecuencia de la militarización de la política migratoria y una mayor presencia de fuerzas armadas en la frontera sur del país la cual ha sido una constante.
“Por la naturaleza y gravedad de los hechos y al existir un contexto de violación sistemática de derechos humanos, así como una política migratoria basada en la militarización, el Estado mexicano está obligado a realizar una investigación seria, imparcial y efectiva”, aseveró.
Agregó que, si estos hechos no son investigados con la debida diligencia, resultaría de algún modo, auxiliados por el poder público comprometiendo la responsabilidad internacional del Estado mexicano.
“Solicitamos al Estado mexicano adoptar medidas de no repetición para limitar la presencia de las Fuerzas Armadas en labores de orden público y en materia de control y revisión migratoria a situaciones excepcionales y asegurar el cumplimiento de medidas preventivas en el uso de la fuerza”, puntualizó.
Monseñor Guadalupe Torres Campos insistió que se debe anteponer siempre la seguridad personal a la nacional y es necesario formar adecuadamente al personal encargado del control en las fronteras.
“En nombre de la dignidad fundamental de cada persona, es necesario esforzarse para preferir soluciones que sean alternativas a la contención de las personas en situación migratoria irregular que entran en el territorio nacional y la militarización de la frontera”, aseguró.
Enfatizó que la CEM se solidariza con las víctimas y sus familiares, extendiendo oraciones por las personas migrantes que murieron en este operativo del Ejército mexicano, y por la pronta recuperación de las personas heridas.
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